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14 ago 2018

Colombia La Guerra Interminable…La Movilización de las FARC-EP y la Expansión del EPL

Por medio de un comunicado, fechado el  día 13 de Diciembre de 2016, son expulsados públicamente de la nueva organización política de las FARC-EP cinco comandantes que se distanciaron del lineamiento político-militar del secretariado, en los medios de comunicación se hacían entonces toda clase de especulaciones infundadas acerca de las “disidencias” y la supuesta aparición de “bandas criminales” a partir del retiro a cuenta gotas de mandos medios y combatientes que pasaron de ser escépticos a sentirse absolutamente chasqueados acerca del feliz término de los acuerdos, todo básicamente  por la corrupción e incompetencia de las instituciones encargadas  y sus funcionarios quienes fueron delegados expresamente por el estado, para hacer efectivos los programas de reinserción con los que se comprometió el gobierno en los diálogos de la Habana.

La realidad es que naturalmente las FARC-EP han retornado a sus zonas de influencia como organización político- militar activa esto independientemente de que les guste o no a los miembros del secretariado, quienes supuestamente representaron a cabalidad los intereses de toda la base guerrillera, durante las negociaciones en Cuba y que pretenden aparecer ahora ante la opinión y la prensa, como los “propietarios exclusivos” de una razón social, acrónimo y logotipo de una organización política armada que se fragmentó; como si esto se tratara de una querella por los derechos sobre un marca registrada, algo muy propio en las economías de mercado capitalistas por los perjuicios económicos y de imagen que el uso ilegal de una marca o material con identidad corporativa ocasionan al propietario legal; pero un concepto muy extraño tratándose de un grupo guerrillero que durante medio siglo defendió con fusil en mano las tesis del socialismo.

La cara más mediática de esta nueva versión de las FARC-EP es el comandante del Frente Oliver Sinisterra, Wálter Patricio Artízala conocido con el alias de ‘Guacho’, excombatiente de la columna móvil Daniel Aldana y quien reivindica el control territorial que históricamente ejerció esa organización insurgente en una área extensa al sur-occidente del departamento de Nariño y en el sur del departamento del Cauca, donde  la población civil está conminada por los ‘traquetos’ a la siembra de cultivos ilícitos porque son una fuente de enormes recursos económicos para las partes interesadas en el negocio, de un lado las bandas organizadas de narcotraficantes, y del otro las organizaciones políticas armadas, por cuenta de los gravámenes que recaudan a modo de “peajes”, durante los procesos asociados a la producción de cocaína y de las actividades de  minería artesanal para el financiamiento de su lucha contra el estado.

Esta simbiosis entre los principales dinamizadores de una creciente economía ilegal que sustituyen*, eficazmente la fantasmagórica institucionalidad, así como cualquier sistema lícito de producción agropecuaria, permiten el surgimiento de una sofisticada forma de “feudalismo insurgente” entre las comunidades marginadas que  reconocen a los alzados en armas como los únicos garantes de su escaso patrimonio y como voceros legítimos del precario interés colectivo de sus pobladores, quiénes a la sazón terminan identificándose ideológicamente con los objetivos políticos de largo plazo de las estructuras guerrilleras y consolidan rápidamente una base social muy amplia que les otorga la fuerza moral así como el control territorial, sosteniendo y fortaleciendo sus estructuras militares y de apoyo logístico.

Esta cuestión no es algo nuevo en el país, ni es el resultado “normal” de la implementación de los acuerdos de paz en el mundo, como se esfuerzan en presentarlo  los medios de comunicación, la reactivación de una organización político-militar como las FARC-EP con la normalización, estructuras orgánicas y jerárquicas, adiestramiento militar, experiencia en combate y la solida formación ideológica de sus integrantes, tiene que preocupar seriamente a toda la sociedad Colombiana, todavía más, con el considerable agravante del acceso que ahora tienen a sofisticados arsenales enviados desde Norteamérica, aumentando dramáticamente su potencia de fuego a un nivel incluso, en el que no está preparado para combatir, el ejército de Colombia. El estado falla reiteradamente en cumplir con su deber más elemental, que es el de ejercer control eficiente sobre el territorio nacional, primero garantizando a todos los ciudadanos los derechos fundamentales consagrados en la constitución. 

Los políticos y funcionarios estatales de todas las tendencias que cohabitan apoltronados cómodamente en los centros urbanos y dedicados enteramente a sacar provecho, con las típicas artimañas e indecorosas componendas que caracterizan desde tiempos inmemoriales, esa forma ruin de hacer política y que redunda en  la gestión de lo público en Colombia  (Hacen notorio en teoría …como que trabajan para las mayorías, pero los resultados de su cometido siempre entregan beneficios concretos para muy pocos), apenas si han oído acerca de los preceptos fundamentales en el servicio público, como son los de patria, estado y soberanía nacional, se refieren a los mismos con un simplismo absurdo que fielmente exterioriza sus arribistas intereses apátridas. 
No pueden concebir que el bien común al concretarse en la sociedad civil que dicen representar, se torna primordialmente en el bien de la patria misma, porque para poder servir al interés nacional, primero hay que profesar el patriotismo, pero...qué es la patria?, la patria ante todo es familia, es cuna,  es pueblo, es tierra, es historia, es cultura, es tradición, es Empatía..!.

La solución que plantean al grave problema de cesión de la soberanía en la que ha incurrido el estado, es básicamente lo mismo de los últimos 60 años, presencia de las fuerzas armadas oficiales a modo de bases militares o estaciones de policía, incluso y con desvergüenza en regiones con deplorables índices de pobreza multidimensional, estos son a todas luces los alarmantes síntomas de la agonía de un estado fallido, cuyo modelo estructural fracasó y que se sostiene únicamente en base a un aumento de la represión como forma exclusiva de restablecer los fingidos derechos, la ley y el orden constitucional. Esta postura tan indolente y desafiante provoca como reacción, animadversión, un sentimiento de reivindicación entre las masas de campesinos que conduce a un subrepticio apoyo de la población más vulnerable a la causa de "la lucha armada para la toma del poder", por parte de las organizaciones insurgentes, que si bien por el momento están lejos de las ciudades principales y no se hacen notar, sí ejercen y a su manera un sistema de gobierno local sobre amplias extensiones del territorio Colombiano.
Prueba irrefutable de esta afirmación es el aumento superlativo de los cultivos ilícitos como secuela directa de la dinámica de control territorial por parte de organizaciones políticas armadas, grupos organizados de mercenarios al servicio del narcotráfico, así como también de las diversas mutaciones de la delincuencia organizada, actores armados que erróneamente el estado observa con suficiencia y apatía, denigrándolos con toda clase de acrónimos ridículos como: “BACRIM, GAO, GDO, GAOR, ODIN”, etc., pero que a razón del desdén con que los califica, paradójicamente, tampoco es capaz de desarticular y suprimir.

El carácter paramilitar de estos grupos; entendiendo la definición del término, no como la entronización de una fuerza implacable cuya misión, es la defensa a ultranza de los intereses económicos de los terratenientes, la corporatocracia o del estado, sino como corresponde objetivamente al significado real y preciso de la palabra: “Toda organización armada cuyo adiestramiento, estructura, cadena de mando, modo de operar y subcultura son en cierta medida similares a las de un ejército”; los convierte a mediano plazo en una amenaza real, creciente y desestabilizadora para la todavía incipiente República de Colombia que luego de más de 200 años de emancipación no se logra transformar en un Estado Nacional Eficiente en garantizar los derechos fundamentales y como proveedor de bienestar para todos sus ciudadanos sin excepción.

Los Comandantes

Los nuevos liderazgos al interior de las FARC-EP destacan por su adiestramiento, experiencia militar y formación política son comandantes sobresalientes que tienen preeminencia, algunos de ellos son verdaderas personalidades con el carisma suficiente para instigar las bases de la guerrilla en aras de sus objetivos particulares, poseen gran capacidad de organización y pueden sincronizar en el corto plazo la cohesión de las, por ahora, fraccionadas unidades, para transformase en un nuevo “ejército irregular” con unidad de mando, de recursos materiales, morales y de propósito.

Néstor Gregorio Vera Fernández alias ‘Iván Mordisco’, lidera el mítico Frente Primero de las FARC-EP, unidad legendaria al interior de esa organización, multiplicadora de fuerza y cuyo propósito ha sido servir de unidad “nodriza”, célebre por sus destrezas como francotirador es además explosivista, cuenta con un número importante de combatientes que le permiten controlar un área nada despreciable en los extensos departamentos del Vichada, Guainía, Guaviare y Vaupés, hecho del que lógicamente se puede colegir que la influencia y las actividades de este grupo no se derivan del accionar de apenas dos centenares de guerrilleros.

Miguel Botache Santillana alias ‘Gentil Duarte’, lidera el Frente Séptimo otra unidad legendaria y uno de los pilares del otrora poderoso Bloque Oriental de las FARC, en el historial de este Frente, destaca su conducción a cargo del propio Jorge Briceño Suárez alias el ‘Mono Jojoy’, renombrado comandante militar del que sobra intentar hacer cualquier tipo de reseña, ‘Gentil Duarte’ es afamado entre los guerrilleros por su habilidad política y capacidad como estratega militar, su unidad tiene bases sociales en los departamentos del Meta y Guaviare cabe resaltar que una amplia zona donde desarrolla sus operaciones esta unidad irregular corresponde a la de mayor PIB per cápita del país.

Wálter Patricio Artízala Vernaza alias ‘Guacho’, lidera un grupo de excombatientes que integraban anteriormente los Frentes Segundo, 64 y la Columna Móvil Mariscal Sucre, pero que proceden mayoritariamente de la Columna Móvil Daniel Aldana un grupo de élite, con los facciosos reunidos bajo su mando activó el Frente Oliver Sinisterra, que controla el occidente del departamento de Nariño y parte del Sur del Cauca, ha logrado una rápida expansión de su estructura por el fuerte flujo de recursos que percibe fruto de los gravámenes a las bandas que están vinculadas al desarrollo de los cultivos ilícitos, producción y tráfico de cocaína. ‘Guacho’ coordina planes concretos de integración con ‘Gentil Duarte’ y el reactivado Comando Conjunto de Occidente de las FARC-EP.

Géner García Molina alias ‘John 40’, comandante de tradicional ascendencia familiar dentro de la organización su abuelo Roque Molina el ‘Diablo’, era un integrante del histórico circulo de Manuel Marulanda Vélez, fue miembro de la juventud comunista JUCO, combatió en los Frentes Séptimo, 40 y 16, como comandante del Frente 43 en el año 2008 fue herido gravemente durante un bombardeo de la F.A.C. A su campamento, es un comandante muy astuto y eficiente  a la hora de conseguir recursos económicos, sabe relacionarse muy bien con los jefes del narcotráfico, también es excéntrico en cuanto a sus gustos personales y las actividades de esparcimiento que organiza para motivar a sus combatientes, es el líder del Frente Acacio Molina, su unidad dirige actividades de minería en el sur de Venezuela y obtiene inmensos recursos económicos por el estricto control que ejerce en las rutas del narcotráfico hacia Venezuela y Brasil, en Colombia opera en los departamentos del  Meta, Guaviare y Guainía, se le perfila como un jefe algo díscolo pero en realidad coordina sus actividades con las estructuras de ‘Gentil Duarte’ e ‘Iván Mordisco’.

Luis Palomino Masmela alias ‘Juvenal’, comandante de la Columna Móvil Miller Perdomo, experto en la elaboración de AEI, municiones y piezas de artillería artesanal, fue jefe de seguridad de Pablo Catatumbo, con más de 20 años en las FARC-EP combatió en el Frente 30, también fue integrante de la Columna Móvil Manuel Cepeda, hábil comandante en el planeamiento y desarrollo de operaciones especiales, su unidad opera entre los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca, coordina sus actividades con las estructuras de ‘Guacho’ y el Comando Conjunto de Occidente.

Otros comandantes destacados que son jefes importantes a nivel regional y que actualmente son considerados como objetivos de alto valor para el estado son: Édgar Mesías Salgado Aragón alias ‘Rodrigo Cadete’ con 35 años de experiencia en las FARC-EP, comandante del Frente 27 fue combatiente en los Frentes 15, 14, 16, 39 y 40,  Ernesto Orjuela Tovar alias ‘Giovanni Chuspas’ comandante del Frente 16, Miguel Díaz San Martin alias ‘Julián Chollo’ comandante del Frente 40, Alexander Díaz Mendoza alias ‘Calarcá’, Mario López Córdoba alias ‘el Negro Eduar’, Gonzalo Prado García alias ‘Sábalo’,  Jairo Ortiz Calderón ‘Jairo 1°’, Ricardo Abel Ayala Urrego alias ‘Cabuyo’. 

(Los comandantes guerrilleros abatidos recientemente son: Nelson Lerves Giraldo alias ‘el Mocho Leiber’ quien fue dado de baja durante la Operación ASTREA IV por un bombardeo de la FAC el 19 de Marzo de 2018 y Luis Alfonso Lizcano Gualdrón alias ‘Euclides Mora’ era el segundo comandante del Frente Séptimo, quien además fue comandante de los Frentes 39, 52, 54 y 62, participó entre otras operaciones en la toma a la base antinarcóticos de Miraflores y en el ataque contra la BRIM # 3 batallón de contraguerrillas # 52 durante el trágico asalto al campamento militar en la quebrada el Billar, en el departamento del Caquetá, fue abatido el 27 de Septiembre de 2017 en la Vereda la Itilla, municipio de Calamar, departamento del Guaviare, por un certero disparo de un Francotirador de las Fuerzas Especiales del Ejército).

Las FARC-EP cuentan actualmente con más de 2.000 guerrilleros divididos aproximadamente  en unas 20 columnas que operan parcialmente en los departamentos de Meta, Vichada, Guaviare, Guainía, Vaupés, Amazonas, Caquetá, Putumayo, Nariño, Cauca, Huila, Valle del Cauca, Chocó y Antioquia. 
Esporádicamente y como ardid se revelan con escaso poder bélico, limitándose a las acciones militares asimétricas, por causa de las intensas operaciones en su contra, se están defendiendo a nivel estratégico,  justo en una coyuntura difícil, donde están en pleno proceso de afianzamiento de sus estructuras armadas, reorganización de su cadena de mando, sus comandantes aún no han establecido los mecanismos de comando, control y comunicaciones, que les permitan aplicar la fuerza efectivamente en el escenario de batalla con los recursos que tienen a su disposición, saben que eventualmente no tienen la capacidad de realizar una defensa en profundidad y prefieren darle prioridad a obtener la cohesión de las distintas fuerzas que todavía están dispersas; ‘corregir ‘ a los camaradas ‘descarriados’, impartir la disciplina, restablecer el orden de las normas internas de comando, la educación y la formación política, coordinar acciones con los otros líderes regionales para frenar las ‘ruedas sueltas’, instruir a nuevos reclutas, acumular pertrechos y poder incoar un rápido proceso de expansión que posteriormente les permita atacar eficazmente a nivel operativo. 
Dentro de los planes a corto plazo, que lidera alias ‘Gentil Duarte’ está en primer lugar  la realización de una cumbre nacional guerrillera, para conciliar las diferencias, evaluar las experiencias, implementar la doctrina, los procedimientos para la integración de medios y definir la jerarquía, basas que les permitan conquistar objetivos comunes, como una sola estructura a nivel táctico y estratégico.

A comienzos del año 2018 el Ejército Popular de Liberación EPL, publicó un vídeo donde presentaba a la opinión, los resultados más que satisfactorios de la gestión de las comisiones pertenecientes al Frente Libardo Mora Toro enviadas al Occidente del país para conformar las nuevas unidades de esa organización que van a operar en Nariño, Cauca y Valle del Cauca, además de la ya conocida presencia de esa organización armada en la conflictiva región del Catatumbo, el EPL ahora está avanzando con éxito en ampliar paulatinamente su área de influencia a otros departamentos fuera de Norte de Santander, producto de la fértil alianza con guerrilleros de las FARC-EP, exintegrantes de la Columna Móvil Mariscal Sucre y los Frentes Sexto y 30 que se desvincularon del fallido proceso de paz con el gobierno, para retomar las armas y continuar en la contienda, pero ahora bajo las banderas del EPL, que ha logrado poner pie en una zona estratégica, para sus propósitos militares y donde la perspectiva de obtener enormes recursos económicos para financiar sus actividades le permitirán volver a ocupar el lugar histórico, que tenían antes de 1991, como organización política armada en Colombia.
El gobierno tiene la imposición ética, de primero cumplir y después hacer cumplir, a todos los ciudadanos con los deberes e igualmente convalidar los derechos consagrados en la constitución de la república que es ley suprema, la cual debe tener alcance en todo el territorio nacional sin exclusión. La aparente reactivación continua de las organizaciones políticas armadas, tanto como de otros tipos de organizaciones cuyas motivaciones son menos altruistas, pero que indefectiblemente ejercen control del territorio, arredran a la población y desarrollan la economía ilegal, son simplemente manifestaciones de una reclamación bizarra y a la vez urgente de soberanía a la administración, por parte de comunidades enteras que han estado continuamente sumidas en el ostracismo.

El actual presidente y sus ministros deben entender que la táctica más eficaz no resulta  de procurar derrotar al nuevo adversario a partir de las guarniciones, sino que la estrategia es ganar la legitimidad moral desde un plan integral de acción conjunta de todos los ministerios en esas zonas de predominio del “feudalismo insurgente”, para así derrotar de raíz las verdaderas causas que originan la rebelión armada, además de otros fenómenos delincuenciales, es un contrasentido limitarse únicamente y de manera temporal a atacar militarmente la consecuencia directa de la irresponsabilidad histórica y moral del Estado y sus instituciones. Esta política incongruente y su desarrollo encaminan al país a un pánfilo escalamiento del conflicto, condenando a la nación a vivir en medio de una trágica  e ineluctable espiral de violencia, que pareciera, no tener fin.

(*Esto por causa de la absoluta ausencia del estado en el ejercicio y defensa real de la soberanía nacional una consecuencia simple y directa de la corrupción y el nulo compromiso del sector público con la ciudadanía, peculiaridad muy usual cuando se crean  “instituciones” burocráticas únicamente con “valía” pero dentro de la participación del presupuesto y sumamente ineficaces en el cumplimiento de su función)

31 dic 2017

Ejército de Tierra: Estructura Básica de las Unidades Militares

Infantería
El Pelotón de Fusileros es la unidad básica tanto de instrucción como de combate en los ejércitos modernos, está constituido por una media de 10 a 12 hombres, entre los cuales siempre hay un Operador, Tirador, de Ametralladora con dos Ordenanzas, comandados habitualmente por un Suboficial de grado Sargento y un Suboficial reemplazante de grado Cabo, dentro de la estructura del Pelotón y dependiendo de la organización militar de la fuerza, puede llegar a incluirse a un Soldado de Primera que ejercerá el mando de un Equipo o Elemento de Combate (5 hombres), en ausencia del Cabo o porque este asume como líder de la unidad. Entre 3 a 4 Pelotones conforman una Sección de Infantería al mando de un Oficial de grado Subteniente, 2 a 4 Secciones dan lugar a una Compañía normalmente al mando de un Oficial de grado Capitán, que tiene como reemplazante a un Teniente o Primer Sargento, 3 a 4 Compañías forman un Batallón (480 a 770 Soldados), al mando de un Oficial de grado Teniente Coronel. La Brigada se forma de la reunión de 3 o 4 Batallones su mando es encargado a un Oficial de grado Coronel o General de Brigada, el Regimiento es una unidad intermedia que es superior al Batallón y en escala equiparable a la Brigada, normalmente una División es la mayor unidad dentro de un Ejército, compuesta por entre 4 a 5 Brigadas bajo el mando de un Oficial de grado General de División. En casos excepcionales se han reunido bajo un mando único dos o más Divisiones que dan lugar a un Cuerpo de Ejército, formación subordinada al mando de un Oficial General Superior a los propios Generales de División con el grado de Teniente General.

Los Pelotones de Infantería no deben ser organizados y equipados invariablemente como un grupo ordinario de 10 o más fusileros con una ametralladora, asimismo pueden configurarse otro tipo de unidades multipropósito por ejemplo, añadiendo o reemplazando a uno de su miembros por un Francotirador dotado con un fusil de alta precisión de 12,7 mm (M-82A1, M-99 Barrett), un Granadero provisto de un Lanzagranadas MGL de 40 mm o con un mortero "Comando" de 60 mm, o un Artillero y sus Ordenanzas, equipado con un sistema de defensa aérea portátil MANPADS (p. ej. KP-SAM Shingung, FIM-92 Stinger), o un explorador armado con una Escopeta semiautomática AA-12 cal. 12 x 2.75". Las Compañías de Infantería Ligera a su vez deben disponer dentro de su estructura  como mínimo de al menos 2 de estas 5 Secciones: Un Pelotón o Sección de Morteros, una Sección o Pelotón Antiaéreo equipado con MPADS (Man-Portable Air-Defense System), un Pelotón Contracarro equipado con Sistemas Portátiles Antitanque (p. ej. RADS Spike-SR, Mectron MSS-1.2 AC), un Pelotón de Zapadores y una Sección Especial de Drones y/o Inteligencia Electrónica, equipada, por ejemplo, con sistemas (MUAV) del tipo AeroVironment RQ-11B Raven / AeroVironment RQ-20 Puma, entre otros.

Las Tropas de la Infantería, en un ejército bien dirigido y organizado, no son ajenas a los principios tácticos de la guerra moderna como: La Movilidad, Maniobra, Potencia de Fuego, Cohesión, Flexibilidad; a nivel de División cada formación debe incorporar como base móvil mínimo una Brigada de Infantería Mecanizada y/o Motorizada (Un promedio de entre 140 a 180 vehículos&blindados; que incluyen desde Motocicletas, Reos, Vehículos Tácticos Multipropósito VTM-VAMTAC, como los Humvee o URO, sumados a otros vehículos de soporte logístico como Camiones Cisterna, Sistemas Móviles C3i, etc., también Vehículos Militares de Ingenieros* tipo: IMR, REM y/o BREM además de AVLB y VCZ (Vehículo de Combate de Zapadores) entre otros como apoyo especializado a los vehículos blindados de transporte y asalto, comenzando desde los básicos M.R.A.P., p. ej. Plasan Sand Cat o RG-31 Nyala, Blindados de Transporte de Tropas tipo APC (Transporte Blindado de Personal) como los TBP M-113, hasta los IFV (Vehículo de Combate de Infantería) como los M2 Bradley, BMP-3 o el GDLS LAV-III). En cualquier unidad moderna de Infantería Mecanizada-Motorizada es lógico y natural el apoyo permanente de secciones especialmente equipadas de sistemas móviles Antiaéreos (SPAAG, ej. M163 VADS; SPAD, ej. LAV-AD, Norinco Tipo 95 SPAAA, 2K22M Tunguska), Antitanque (p. ej. BGM-71 TOW, RADS Spike-ER), Artillería Autopropulsada y de Saturación (MLRS ej. Avibras Astros II) e Ingenieros* (Movilidad, Contramovilidad y Defensas). 

Las Unidades Operativas Mayores deben incluir dentro de su amalgama de “Armas” o cuerpos tradicionales (Infantería, Caballería, Artillería, Ingenieros Militares,…) a la Caballería Aérea, es decir a los Helicópteros de Transporte-Artillados tanto para el despliegue de Fuerzas Especiales en Operaciones Aeromóviles de Asalto y de Grupos de Artillería Aeromóvil (GARTAM con piezas de 81 mm, 105 mm (Obús), 120 mm y  MANPADS), como para Apoyo Aéreo Cercano (CAS; Close Air Support) a Unidades de Infantería Ligera y Unidades Blindadas de Caballería e Infantería Mecanizada con Helicópteros de Ataque (p. ej. Sikorsky AH-60L Arpía IV, AgustaWestland AW129 Mangusta, HAL Light Combat Helicopter, entre otros).

Caballería
Las Unidades Acorazadas modernas tienen su origen en la Batalla de Cambrai (20 de Noviembre de 1917), allí se emplearon con relativo éxito alrededor de dos Divisiones de Tanques Británicos Mark IV, cuya misión era romper en ese sector, la línea Hindenburg. Actualmente un número limitado de ejércitos mantienen en servicio activo fuerzas montadas a caballo (Únicamente en unidades especiales de montaña), sin embargo el término "Caballería" se atribuye a las unidades militares que desarrollan sus operaciones en Carros de Combate (CPC-MBT), vehículos blindados o helicópteros de transporte, artillados/ataque y que cumplen una misión semejante a la de la antigua caballería.

El Batallón de Tanques (MBT) es una unidad compleja tanto por el carácter de las misiones que ejecuta, como por el abundante material y equipo que debe poseer, su éxito depende en gran medida de una eficiente cadena logística de suministros y del apoyo constante de unidades especiales de: Infantería, Artillería Autopropulsada y Antiaérea, Ingenieros (Movilidad, Contramovilidad), Caballería Aérea y/o Aviación con misiones de Reconocimiento y Cobertura Aérea, (Apoyo Aéreo Cercano con Aviones de Ataque a Tierra y Helicópteros de Ataque), las principales fortalezas de las unidades acorazadas son: El gran impacto psicológico y moral que causan en las tropas del adversario, su gran capacidad de maniobra en profundidad, movilidad, potencia de fuego y flexibilidad. Su talón de Aquiles es el rápido desgaste de material y el factor distancia/tiempo a sus propias líneas de abastecimiento.
La estructura de un Batallón Acorazado está compuesta de la siguiente forma: Liderado por una plana mayor normalmente de 2 tanques (Comandante y reemplazante), otros 2 tanques junto a un vehículo blindado ligero, son los encargados de la protección y apoyo del comando de la unidad, le siguen 3 compañías apoyadas por diversas secciones como son: Sección Antiaérea, Sección de Ingenieros, Sección de Mantenimiento y Recuperación, Sección Medica, Sección de Reconocimiento, entre otros tipos de organización según la doctrina de cada ejército.
Cada compañía está formada por una plana mayor de 2 tanques Comandante y reemplazante,  más un vehículo blindado ligero (otro tanque o un blindado del tipo AFV) y un vehículo táctico multipropósito, 3 pelotones de entre 4 o 5 tanques completan la formación para un total de entre 14 a 17 tanques por compañía. El batallón acorazado reúne entonces entre 46 a 55 Tanques, sin incluir a otros tipos de vehículos de reconocimiento, comando, apoyo y soporte logístico. Un Regimiento o Brigada de tanques está compuesto por 3 batallones y entre 2 a 3 Regimientos forman finalmente una División Acorazada (276 a 330 Tanques), finalmente cabe resaltar que las unidades acorazadas rara vez disponen del 100% de sus elementos, por regla se considera más que sobresaliente a una división que este al 75% de su capacidad, esto porque sus tanques, armas y demás vehículos van a estar sujetos a cumplir con los diferentes escalones de revisión y mantenimiento.

Artillería
La Artillería tiene como unidad básica la batería (Equivalente al Pelotón de la Infantería o al Escuadrón de las unidades acorazadas, pero con notables diferencias en la cadena de mando con respecto a la Infantería; por ejemplo un Obús de 105 mm está a cargo de un Suboficial de grado Cabo de Primera o Sargento y la batería en conjunto está subordinada, a las ordenes de un Oficial de grado Teniente o Capitán.) compuesta por entre 4 a 6 piezas dependiendo del calibre de las mismas, este cuerpo o “arma” tuvo su cenit durante las largas campañas de la Primera Guerra Mundial en ese entonces se desencadenaron verdaderas batallas de material, un impresionante despliegue de miles de piezas de todos los calibres a lo largo de las extensas líneas de defensa, entre los contrincantes eran común la tesis de: “La Artillería Conquista y la Infantería Ocupa…”, en los duelos artilleros, el resultado final depende de tres factores, básicos: La precisión, la potencia de fuego (Intrínsecamente ligada al alcance) y la superioridad material, para el despliegue de las baterías de artillería se estudia con antelación: Cuál es el tipo de tropas a las que se debe apoyar (Infantería Ligera, Infantería Mecanizada/Motorizada, Unidades Acorazadas), El Objetivo,  El Terreno y el Tiempo (meteorológico). El desarrollo de las unidades blindadas durante el periodo de entreguerras dio lugar posteriormente durante la Segunda Guerra Mundial al desarrollo de la Artillería Autopropulsada (Sd.Kfz. 124 Wespe de 105 mm) y posteriormente del lado Soviético durante la invasión Alemana a la Artillería de Saturación (Katyusha MLRS), que se mueven a retaguardia de las unidades mecanizadas, a pesar de la aparición de la aviación militar desde 1914, la Artillería no perdió protagonismo en las grandes batallas y tuvo un papel decisivo en las victorias de los  ejércitos en contienda.

La estructura clásica de las unidades de Artillería llega hasta el nivel de Regimiento. Una batería está integrada normalmente por entre 4 a 6 piezas (Obuses de 105 mm, Morteros de 120 o 160 mm (M-66 Soltam), etc.), 4 baterías forman una compañía y 4 compañías a su vez un batallón, 3 o 4 batallones dan lugar a un Regimiento de Artillería (Entre 192 a 384 piezas) comandado por su equivalente en la Infantería al General de División. En la medida que aumenta el tamaño y calibre del arma, la unidad básica de los Artilleros reduce el número de piezas que la integran, normalmente dentro de las unidades autopropulsadas tipo MLRS, obuses ATP de 155 mm o piezas de 200 mm o más, una batería se forma máximo con 3 o 4 unidades. En el Teatro de Operaciones las unidades de Artillería, normalmente se despliegan detrás de una "cortina" de sistemas móviles de defensa aérea de corto y/o mediano alcance.

26 oct 2015

El Ciclo Boyd y la Guerra de Maniobras

Grupo Táctico Inter-Armas (GTIA)


MANIOBRA: Operación que se hace en un asunto con habilidad y astucia para conseguir un fin determinado.
A veces la palabra maniobra se emplea como “fuego y movimiento de pequeñas unidades tácticas”, El Coronel Soviético F.D. Sverdlov ofrece una definición tradicional en un estudio reciente: Tactical Maneuver (Maniobra Táctica) “Maniobra es un movimiento organizado de tropas (fuerzas) durante operaciones de combate en un nuevo eje (línea) y sector con el propósito de obtener una posición relativamente favorable sobre el enemigo a fin de desarrollar una acción decisiva”.
Las "doctrinas de fuego" o las "doctrinas de maniobra": Este debate nace durante la Primera Guerra Mundial y básicamente se refiere al propósito de las propias fuerzas dirigidas esencialmente hacia la destrucción física del enemigo "doctrinas de fuego" o la búsqueda de su colapso estructural, sin que implique necesariamente su aniquilación física "doctrinas de maniobra". 
Las "doctrinas de fuego" no requieren tropas muy adiestradas (por lo que son aptas para los ejércitos de reclutamiento obligatorio), tienden a una gran centralización del mando, desaconsejan la iniciativa en los niveles de mando subordinados, precisan tiempo para que la superioridad de medios se haga efectiva en el campo de batalla (lo que implica campañas largas) la victoria se basa en agotar al enemigo (ocasionando conflictos cruentos y destructivos). Por su parte, las "doctrinas de maniobra", precisan ante todo tropas de muy elevada capacidad, con mandos de gran iniciativa y visión estratégica (para aprovechar las oportunidades en el campo de batalla), prefieren campañas cortas que permitan la victoria antes de que la diferencia de medios incline la balanza en su contra y buscan el colapso del enemigo, no su destrucción.
En la teoría del Coronel Jhon Richard Boyd, que es la teoría de la guerra de maniobras. El conflicto puede ser visto como ciclos de decisión: Observación, Orientación, Decisión, Acción, OODA.

  • Observación: La recolección de datos.
  • Orientación: El análisis y síntesis de los datos para formar el concepto mental de perspectiva.
  • Decisión: La determinación de un curso de acción basado en la perspectiva mental actual.
  • Acción: La realidad jugando a las decisiones.

Que deben durar el menor tiempo posible. Cada parte de un conflicto comienza por observar. Se observa primero a sí mismo, sus alrededores físicos y a su enemigo. Sobre la base de esta observación, se orienta, es decir, se hace una representación mental o “instantánea” de la situación. Sobre la base de esta orientación, toma una decisión. Luego lleva la decisión a la realidad y actúa, posteriormente asume que su acción ha cambiado la situación, observa otra vez, y comienza el ciclo de decisión nuevamente. Sus acciones siguen este ciclo, frecuentemente llamado el “Ciclo Boyd” o “Círculo OODA”. Si un bando en combate puede realizar el ciclo Boyd más rápido que el otro, obtiene una gran ventaja. Cuando el bando más lento actúa, el más rápido está haciendo algo distinto a lo que aquel observó y su acción resulta inapropiada por un mayor margen de tiempo. Ni siquiera cuando se esfuerce cada vez más por hacer algo que funcione, cada acción es menos útil que su predecesora, lo que marca el éxito o el fracaso en un conflicto es el movimiento relativo de los contendientes a lo largo de sus respectivos ciclos OODA. Aquel que una y otra vez consiga Observar, Orientar, Decidir y Actuar más rápidamente que el oponente, acabará por introducirse dentro del ciclo OODA del adversario y podrá lograr que la reacción del enemigo sea totalmente inapropiada a la situación en curso. Según Boyd, la clave del éxito en un conflicto está en conseguir introducirse en el ciclo OODA del adversario y permanecer en él, Sí en un conflicto conseguimos introducirnos y permanecer dentro del ciclo de decisión del adversario, la parálisis del enemigo y su posterior colapso es sólo cuestión de tiempo. Para Boyd, el verdadero objetivo del mando y control de la guerra es alcanzar esa parálisis del oponente que tarde o temprano le conducirá al colapso. Se trata en definitiva de incapacitar al enemigo de adaptarse a la situación y poder hacerle frente. Pero...¿cómo se puede aumentar la velocidad del ciclo de decisión propio y al mismo tiempo ralentizar el del enemigo?. Para dar respuesta a esta pregunta, Boyd recurre al concepto de fricción de Clausewitz y afirma que la solución consiste en reducir al mínimo la fricción propia y aumentar al máximo la fricción del enemigo. Minimizar nuestra fricción y maximizar la del enemigo es la clave para vencer. Para minimizar la fricción propia, es necesario reaccionar más rápidamente que el oponente, lo cual se logra gracias a la iniciativa de los niveles bajos de la cadena de mando. Pero para fomentar esa iniciativa, primero es necesario tener la seguridad de que toda la cadena tiene un perfecto conocimiento de las intenciones y propósitos de su comandante y todos sus eslabones están perfectamente identificados con él. Esta visión compartida de las intenciones del jefe es lo que asegura la coherencia entre la estrategia, las operaciones y las diferentes acciones tácticas que se lleven a cabo para alcanzar los objetivos. Sin una meta común y sin una visión compartida de las intenciones del mando y de cuál debe ser la mejor forma de alcanzar su propósito, la libertad de acción de los subordinados corre el peligro de convertirse en una dispersión del esfuerzo y en consecuencia, en un aumento de la fricción. 
Para maximizar la fricción del enemigo, Boyd dice que es necesario atacar de forma paralela o simultánea los cuatro Nodos del ciclo OODA por medio de una combinación de acciones totalmente diferentes unas de otras, coordinadas entre sí, sincronizadas en el tiempo y de ser posible, explotando el factor sorpresa. Se trata de provocar una multiplicidad de hechos, variados y comprimidos en el tiempo, de modo que generen graves anomalías en el ciclo del adversario. El efecto que se busca consiste en causar al enemigo un trastorno y una confusión tal, que sea incapaz de identificar qué es lo que realmente está sucediendo, que no pueda discernir entre lo que realmente constituye una seria amenaza para él y lo que es un hecho sin trascendencia, y evitar que sea capaz de dar una respuesta coherente a las diferentes situaciones que se le presentan ante sí, creadas de forma deliberada por nuestras fuerzas. Actuando de este modo conseguiremos paralizar al enemigo, deteriorar su moral, reducir su voluntad de lucha y, finalmente conducirle a una trampa de la que no pueda salir. Como se puede observar aquí, las ideas de Boyd sobre la C2W apuntan no sólo a una forma de guerra de maniobra dónde el objetivo no sólo son los aspectos físicos y materiales del adversario, sino que también uno de los principales objetivos consiste en destruir la moral y la voluntad de lucha del enemigo. Se trata de penetrar tanto en la entidad física como en el espacio mental y moral del oponente. 
Resulta irónico que uno de los puntos fuertes de la teoría de Boyd constituya a su vez una de sus debilidades potenciales: El énfasis en la dimensión temporal del conflicto, haciéndose eco de la visión Estadounidense sobre las operaciones de alto ritmo, Boyd presume de que mantener un ritmo de operaciones más elevado que el del enemigo, es también el punto de vista y la preferencia del enemigo. Puede ocurrir, y de hecho la historia recoge casos en los que al enemigo no le haya interesado mantener un ciclo OODA más rápido que el del adversario. En realidad, puede que al enemigo no le interese para nada seguir nuestras reglas. Incluso puede ocurrir que al adversario le interese ralentizar deliberadamente su ritmo, y obligarnos a mover las fichas una y otra vez, en espera de que descubramos nuestras debilidades o cometamos algún error, De hecho esa fue la estrategia de Mao Tsé-tung para liberar a China de los Japoneses. Mao defendía la estrategia de la parsimonia o, en términos anglosajones, “Protracted War” como el único medio de derrotar a los Japoneses, que eran militarmente muy superiores. Mao hizo del tiempo un arma más. La estrategia de Mao demostró su validez primero en la guerra contra la ocupación Japonesa y más tarde en la resistencia Vietnamita contra Francia y posteriormente contra Estados Unidos. Sin embargo, esta diferencia de puntos de vista entre Mao y Boyd, no prueba otra cosa que la importancia del tiempo en el desarrollo de un conflicto, ya sea acelerando el ciclo OODA o retardándolo lo más posible, tratando de obligar al enemigo a que "muestre todas sus cartas". Se ha visto, en primer lugar que, un sistema de mando y control es una herramienta que permite a un mando militar o a una autoridad civil conocer lo que está ocurriendo y ayudarle a dar una respuesta adecuada a la coyuntura. Se ha hecho también referencia a las cuatro tareas básicas que efectúa cualquiera de estos sistemas y a cuyo ciclo Boyd denomina OODA. A continuación, se ha visto que la C2W es cualquier modo de guerra que tenga por objetivo, interferir, modificar o romper este ciclo.
La teoría Boyd define lo que se entiende por la palabra “Maniobra” en la expresión “Guerra de Maniobras”, que significa introducir al enemigo en el ciclo Boyd, siendo consistentemente más rápido en todos los círculos OODA que se necesiten  hasta que el enemigo pierda su cohesión, para que no pueda pelear más como una fuerza efectiva y organizada.
Algunas veces, un enemigo introducido en un ciclo Boyd cae en pánico o llega a quedarse pasivo. Este es un logro ideal para alcanzar la victoria, porque un enemigo atacado por el pánico, o pasivo puede ser aniquilado o capturado con un menor costo de bajas propias. Otras veces, el enemigo vencido puede continuar luchando a través de individuos o en unidades pequeñas. Pero a causa de que no puede actuar más como una fuerza, sin cohesión es comparativamente más fácil de destruir. Sí el objetivo en la guerra de maniobras es moverse a través del ciclo OODA más rápido que el enemigo. ¿qué necesita hacer usted?. ¿Cómo se puede ser más rápido?.

1. Sólo una organización militar descentralizada puede tener un círculo OODA más rápido. Si las observaciones deben ser pasadas hacia arriba a través de una complicada cadena de comando vertical, la orientación hecha y la decisión tomada a un alto nivel, y la orden para la acción es transmitida luego hacia abajo a través de la cadena de comando, el ciclo OODA va a ser muy lento. Como ha observado el historiador militar Israelí Martín Van Creveld.
2. Guerra de maniobras significa que usted no solamente aceptará un porcentaje de confusión y desorden, para operar exitosamente dentro de ellos, a través de la descentralización: Usted también generará confusión y desorden: las tácticas de “reconocimiento de arrastre” de la  Blitzkrieg Alemana eran inherentemente desordenadas. Los altos mandos no podían dirigir ni predecir el curso exacto del avance: pero los múltiples ataques de reconocimiento Alemanes generaron confusión masiva entre los Franceses en 1940. Cada uno era informado como un nuevo ataque. Los Alemanes parecían estar en “todas partes” y los Franceses cuyo sistema de mando y control requería total certeza antes de tomar cualquier decisión, quedaron paralizados.
3.  El enemigo no debe ser capaz de anticiparse a nuestras  acciones. Sí sus tácticas siguen un patrón común, predecible, el enemigo fácilmente puede cortar su ciclo OODA. Si puede predecir lo que usted hará, lo estará esperando. En lugar de una lista de verificación o una orden de operaciones, la guerra de maniobras requiere de comandantes astutos, visionarios, capaces de identificar las oportunidades más allá de lo que pueden ver, que entiendan las fortalezas y debilidades críticas del enemigo en una situación específica. Deben ser capaces de crear múltiples amenazas y mantener al enemigo en la incertidumbre sobre qué es real y qué es una distracción. Deben ser capaces de valorar todas sus opciones en la situación antes que el enemigo, constantemente estar dando lugar a  nuevas oportunidades, y variar rápidamente las acciones a medida que la situación se desarrolla.

El General Hermann Balck, uno de los más exitosos practicantes de la guerra de maniobras, dijo: “Estoy contra la regla de la escuela que dice: “De acuerdo con las ideas del Estado Mayor General, en esta situación usted debe hacer esto y aquello”.

4. Uno de los primeros principios tiene que ser: "No deben existir esquemas fijos". Cada esquema, cada patrón, es incorrecto. No hay dos situaciones idénticas. Es por ello que el estudio de la historia militar puede resultar extremadamente peligroso. Otro principio que se desprende de esto es: Nunca repita la misma acción dos veces. Aún cuando algo funcione bien para usted una vez, para la segunda vez el enemigo ya se habrá adaptado. Por lo tanto, usted tiene que pensar siempre en algo nuevo.

Sí la guerra no puede ser hecha mediante fórmulas y modelos, ¿entonces cómo puede ser hecha?.
Una definición de táctica usada con frecuencia en guerra de maniobras es: “Táctica es un proceso de combinación de dos elementos, técnicas y educación, a través de tres “filtros” mentales o puntos de referencia: Órdenes tipo misión, el esfuerzo principal o “Schwerpunkt”, y la búsqueda de la superficies y vacíos enemigos, con el objeto de producir una aproximación original (novedosa) para el enemigo, momento y lugar específicos.
La táctica no es una “cosa”, sino un proceso, especialmente un proceso mental. Es el camino para hacer algo. No es solamente un cierto tipo de ataque o defensa, es también por qué elige usted ese ataque o defensa particular. Táctica no es sólo su decisión como comandante: Es también cómo llega usted a esa decisión, su método. La definición dice que el propósito del proceso es una aproximación “original”. Usted siempre tendrá que hacer algo diferente, algo que el enemigo no espere.
Usted debe considerar al enemigo, momento y lugar específicos. Todo debe estar de acuerdo a la situación. Cada situación es diferente. Cada enemigo se comporta diferente a los demás. Los Franceses, Coreanos del Norte o Sirios combaten diferente que los Rusos. Una división, regimiento o compañía Estadounidense combate diferente que otras. Y la misma unidad enemiga luchará el Jueves de forma diferente a como luchó el Martes. Lo que usted decida como comandante debe tener en cuenta todos estos cambios. Lo que rinde un día no rendirá otra vez al día siguiente.
La táctica combina dos elementos básicos técnicas y educación. Las técnicas son cosas que usted hace por fórmulas. Incluyen como cerear un fusil, armar una ametralladora, dar una orden, establecer comunicaciones, pedir apoyo de fuego, ejercitar la dotación de un pieza de artillería, ejercitar un pelotón para la batalla, etc. La excelencia en técnicas es muy importante en la guerra de maniobras. Algunos han sugerido que las reglas de la guerra de maniobras no tienen en cuenta las técnicas. Esto es totalmente incorrecto. Una de las mayores diferencias entre un militar que puede hacer guerra de maniobras y uno que solamente puede hablar acerca de ella es su capacitación en técnicas. Las técnicas chapuceras retardarán su ciclo Boyd y harán inefectiva  su acción.  
El proceso que es la táctica incluye el arte de seleccionar entre sus técnicas aquella que da como resultado esa aproximación original para el enemigo, momento y lugar específicos. La educación es la base para hacerlo, educación no en qué hacer, sino en cómo pensar. La historia militar, los juegos de guerra, las excursiones tácticas y todas las demás herramientas educativas deben ser utilizadas por todos los Suboficiales y Oficiales para educarse militarmente. Solamente la combinación de técnicas y educación permitirá a un Suboficial u Oficial hacer la guerra de maniobras. La educación sin capacitación en técnicas significa que las tácticas serán formulistas, rígidas y predecibles por el enemigo.

Un filtro es un punto de referencia mental, un camino para ayudar a formar y guiar su proceso mental. Tres son de gran ayuda en la guerra de maniobras: Órdenes tipo misión Schwerpunkt y superficies y vacíos.

1. Órdenes tipo misión. Las órdenes tipo misión son la clave para la necesaria descentralización y de este modo lograr un rápido Ciclo Boyd . Una orden tipo misión le dice al comandante subordinado lo que su superior quiere lograr: “Esta es la misión…” Deja “el cómo lograrlo” de tarea al subordinado. A medida que la situación cambia, el subordinado hace lo que de acuerdo a sus competencias piensa qué es necesario para conseguir el resultado que su superior desea, informa a su superior lo que ha hecho, pero no espera autorización antes de actuar, ¿Qué le pasaría a su ciclo Boyd si lo hiciera?.

Una manera útil de pensar en órdenes tipo misión es en términos de contrato entre superior y subordinado. Hay dos tipos de contratos. Uno es a largo plazo. Está basado en lo que llamamos la intención del comandante. Esta es la visión a largo plazo del comandante de lo que él quiere que le suceda al enemigo, del resultado final que desea. El subordinado necesita comprender estos dos niveles hacia arriba. Si es un jefe de sección, necesita saber la intención del comandante del Batallón. Si es un jefe de compañía, necesita saber la intención del comandante de Brigada, si es un jefe de Batallón necesita saber la intención del General de División. El “contrato” es simple: el subordinado se compromete a lograr que su acción sirva a la consecución del objetivo de su superior, lo que debe ser cumplido y el superior se compromete a  que dará al subordinado gran libertad de acción en términos de cómo hacer realidad su intención.

La misión es un contrato a corto plazo. Es una “tajada” de la intención del comandante, una tajada lo bastante pequeña como para ser apropiada a la situación inmediata de la unidad subordinada. El contrato es el mismo; el subordinado acepta que sus acciones contribuyan a la misión a cambio de un amplio margen de libertad en la selección de los medios.
En algunos casos, la libertad de acción dada al subordinado puede ser total. El superior puede no especificar más que el resultado que debe ser obtenido. Por ejemplo, durante la batalla sobre los Altos del Golán, en la guerra de Yom Kippur en Octubre de 1973, un comandante Israelí recibió órdenes para bloquear una Brigada blindada Siria. Esta fue toda la orden: “No los deje pasar”.

2. El segundo “filtro” que une las actividades es el centro del esfuerzo o, para utilizar el término Alemán Schwerpunkt. Este término se traduce como "punto de esfuerzo principal", pero tal traducción es peligrosa. No es un punto en el mapa. Es dónde el comandante cree que obtendrá un resultado importante, y lo traslada a una unidad, diciendo "Schwerpunkt es el 2° Batallón llevando el esfuerzo principal". Cuando una unidad es designada centro del esfuerzo, todas las demás unidades trabajan para apoyarla. La misma obtiene suministros, artillería, aviación, material, etc. La reserva se ubica en relación a su área de operaciones para poder explotar su éxito. El concepto Schwerpunkt es muy importante para cualquier fuerza que combate siendo superada numéricamente, porque le permite dirigir todo su poder a un propósito. Sí concentra todo su esfuerzo en uno de los puntos débiles del enemigo, puede vencer a su oponente aunque sea en suma total, más poderoso. Schwerpunkt no es sólo el ataque principal (aunque el ataque principal está frecuentemente en el Schwerpunkt). Es un centro conceptual, no solamente físico. Todos los comandantes concurren al Schwerpunkt, junto con la intención y la misión de su superior, al tomar sus propias decisiones. Cada uno se asegura que sus decisiones apoyen al Schwerpunkt. El Schwerpunkt puede ser comprendido también como el elemento de coordinación o el medio a través del cual se obtienen los convenios de intención y misión. Aúna los esfuerzos de todos los subordinados y los centra en el objetivo, hacia el resultado final que desea el comandante.

3. El tercer “filtro”, superficie y vacíos ayuda a guiar la decisión. Explicado simplemente, superficies y vacíos son las fortalezas y debilidades del enemigo. Los “vacíos” son útiles a los comandantes de pequeñas unidades, porque describen los tipos de fuerzas y debilidades que encontrarán con frecuencia. Una “superficie” es una línea de defensas enemigas. Un “vacío” es un agujero en dicha línea. Usted busca colocar su Schwerpunkt opuesta a un vacío, no a una superficie. En guerra de maniobras, trate siempre de evitar los puntos fuertes del enemigo y de lanzar su acción más importante contra las debilidades de él. Usted debe "usar el judo, no entrar en una pelea de boxeo". Para un jefe de sección o compañía, y aún para un comandante (jefe) de batallón, una debilidad enemiga viene a ser una brecha física en la posición enemiga ¿cómo puede encontrar su brecha?. A través de lo que llamamos “reconocimiento de arrastre”. Con el reconocimiento- arrastre, el eje de avance se determina por los resultados del reconocimiento en lugar de ser fijado por el comando, y varía en respuesta a lo que el reconocimiento encuentre. Un ejemplo de un tipo de ataque puede ser de ayuda para entender esto. Su elemento de vanguardia es una fuerza de reconocimiento. Su trabajo es buscar superficies y vacíos. Cuando encuentra un vacío avanza a través de él, y llama a otras fuerzas para que la sigan. Si la brecha parece ser promisoria, el comandante de la unidad envía más fuerzas a través de ella. Algunas fuerzas ensanchan la brecha y se despliegan detrás de la posición enemiga que ha sido penetrada, derrumbándola desde la retaguardia. Mientras tanto, la fuerza de reconocimiento continúa moviéndose hacia delante, buscando siempre el paso de menor resistencia. El reconocimiento lanza la fuerza principal alrededor de las superficies enemigas y más profundamente aún dentro de la posición enemiga. 
En la guerra de maniobras, el reconocimiento es responsabilidad de todos. Los tres “filtros” órdenes tipo misión, Schwerpunkt y superficies y vacíos son tan importantes en la guerra de maniobras que forman parte de nuestra definición de tácticas de maniobra. Pero también hay otras herramientas útiles. La primera entre ellas es el poder de fuego. El poder de fuego es muy importante en la guerra de maniobras. Algunos han acusado a la guerra de maniobras de sostener la degradación del poder de fuego. Nada podría estar más lejos de la realidad. Lo que cambia en la guerra de maniobras no es la importancia del poder de fuego, sino el propósito para el cual se usa.
La guerra de poder de fuego/desgaste usa mayormente el poder de fuego en la forma que el término implica, es reducir los efectivos enemigos a través del desgaste. El movimiento sirve al poder de fuego, usted se mueve para conseguir una mejor posición de tiro para causar más desgaste.

La guerra de maniobras utiliza tanto el poder de fuego como el movimiento en un contexto de maniobra. ¿Qué significa esto? . Usualmente, usted no sólo se mueve a una mejor posición de fuego, sino también para crear una serie de situaciones inesperadas y peligrosas para el enemigo. Sólo este movimiento llena los requisitos de maniobra. El principal rol del poder de fuego es ayudar a su maniobra. El poder de fuego es utilizado más a menudo para inmovilizar al enemigo mientras usted se mueve alrededor o a través de él.
Así como cambia el propósito del fuego de apoyo en la guerra de maniobras, también cambia la forma de empleo, quienes practican la guerra de maniobras se esfuerzan por emplear los sistemas de apoyo de fuego no sólo como armas de apoyo sino también las armas combinadas.

¿Cuál es la diferencia?. Las armas combinadas golpean al enemigo con dos o más tipos de fuego simultáneamente, de manera tal que las acciones que debe emprender para defenderse de una lo hacen más vulnerable a la otra. En contraste, las armas de apoyo golpean al enemigo con dos o más armas en secuencia o sí lo hacen simultáneamente, en tal combinación, las acciones que el enemigo debe emprender para defenderse de una, también le sirven para defenderse de la(s) otra(s).

Las armas combinadas, como otros elementos de la guerra de maniobras, buscan golpear al enemigo tanto moral como psicológicamente. Poner al enemigo entre la espada y la pared: Por ejemplo, digamos que usted se está defendiendo contra un ataque de tanques enemigos. Construye un campo minado para cubrir una avenida de aproximación que también está dentro del alcance de sus ATGM TOW. El enemigo halla las minas y usted los ataca con los ATGM TOW simultáneamente. Para evitar las minas, deben moverse lenta y cuidadosamente y contar con buena visibilidad. Para evitar los Antitanque TOW, deben moverse rápida y bruscamente y dificultarles la visibilidad. Cada posibilidad los coloca en un problema y el hecho de que este problema no tiene una solución práctica golpea su cohesión mental.
Las armas de apoyo, en contraste, enfrentan al enemigo sólo con un problema, no con un dilema. Digamos que usted está enfrentando infantería enemiga atrincherada. Solicita apoyo aéreo, seguido por artillería. Para eludir el ataque aéreo, el enemigo permanece en sus búnkeres y trincheras. Para eludir la artillería, hace lo mismo. Aún sí ambos, artillería y ataque aéreo, golpean al mismo tiempo, no tienen un dilema. El problema del enemigo tiene una solución, y el único efecto de esa acción es algún desgaste. La distinción entre armas combinadas y armas de apoyo es importante, porque las armas combinadas no utilizan más poder de fuego, pero usualmente serán mucho más efectivas. Si usted está combatiendo con desventaja numérica, necesita obtener el mayor efecto posible de sus sistemas de apoyo de fuego. La importancia del poder de fuego en la guerra de maniobras no puede ser enfatizada en demasía. En algunos casos, encontrará una brecha en la posición enemiga y se infiltrará a través de ella. Pero en muchas situaciones, se tendrá que mover de frente al enemigo. El único camino para hacer eso es inmovilizarlo con fuego, neutralizarlo mientras se mueve alrededor o a través de él. La neutralización debe ser muy fuerte y oportuna para que sea efectiva. Una segunda herramienta importante en la guerra de maniobras es el contraataque que es un ataque al propio ataque enemigo. Pero realmente es más que eso. Es una acción que se realiza luego de que el enemigo se ha comprometido irrevocablemente.
Cuando el enemigo ha lanzado su ataque, se ha empeñado en una acción definida con todos o casi todos sus recursos. Su impulso lo está llevando en una determinada dirección. Sí se le presenta una amenaza sorpresiva e inesperada, tendrá una gran dificultad para enfrentarla, mucha más dificultad que si no estuviera haciendo nada. Nuevamente, la guerra de maniobras es como el judo, usted debe usar el propio impulso del enemigo contra él. Eso es lo que hace un buen contraataque. En muchas oportunidades el contraataque será la llave de una defensa exitosa. Si usted está peleando en inferioridad numérica, generalmente no podrá llevar a cabo una defensa lineal, una defensa donde trata de sostener una línea contra el ataque más fuerte  que su oponente puede montar. Aún cuando la mantenga, él lo habrá golpeado fatalmente. Cómo fuerza menor, usted no puede ganar por desgaste, pero ciertamente puede perder por el.
Tanto en combate defensivo como en el ofensivo, usted quiere destrozar la cohesión de las unidades enemigas, no solamente eliminar sus tropas y destruir su equipo.

Una herramienta común para lograr esto es el contraataque. En general, el contraataque debe tener tres características para ser exitoso. Primero, debe ser fuerte. Cómo Guderían exclamara frecuentemente, “No lo pinche, hágalo puré”. Segundo, debe obtener sorpresa golpeando al avance enemigo en un punto débil creado por su propio impulso hacia adelante. Por último, y lo más crítico, el éxito de un contraataque depende de la oportunidad. El comandante (jefe) debe ser capaz de identificar ese momento en que el enemigo, expuesto y cansado, es incapaz de responder rápidamente a una amenaza inesperada. Dados estos tres elementos, un contraataque puede ser una herramienta táctica devastadora.
Una tercera herramienta importante, relacionada íntimamente con el contraataque, es la reserva. Tanto en el ataque como en la defensa, una reserva fuerte es clave para retener la iniciativa y obtener la victoria. Esta es la herramienta con la que usted puede ensanchar brechas y crear pasos reforzando éxitos, sin una reserva fuerte, aún las oportunidades más promisorias serán desaprovechadas, porque usted no será capaz de explotarlas. Además, una reserva fuerte ofrece tal ventaja potencial que refleja una suerte de proporcionalidad inversa, la más débil, la fuerza principal que enfrenta al enemigo, la más fuerte, la reserva. Y además, cuando más incierta o confusa sea la situación más fuerte debe ser la reserva.
Cuarto, para ser capaz de combatir al enemigo usando la guerra de maniobras, necesita usted un sistema de comando y control basado en el liderazgo y en el monitoreo. El liderazgo requiere que cada nivel tome riesgos y asuma responsabilidades dando adecuada libertad a los subordinados. La diferencia entre responsabilidad y obligatoriedad es muy importante. La responsabilidad  garantiza amplio campo de acción a los subordinados y les permite “errores honestos”. Obligatoriedad, con su gestión de castigo, demanda absoluto conocimiento y control de todas las acciones de los subordinados.

El "segundo" del comando y control en la guerra de maniobras es el monitoreo. Dicho simplemente, los monitores apoyan al liderazgo proveyendo discreto control por ausencia a través de la observación y la escucha. En lugar de requerir cantidades inútiles de informes periódicos, el monitoreo incorpora avanzados principios de comando y monitoreo radial “el que calla otorga”. Permitiendo a los subordinados librar la batalla, el comandante en jefe interviene únicamente para explotar oportunidades o desviar el centro de gravedad. Íntimamente relacionado con el liderazgo, el monitoreo permite obtener el máximo de información sin interferir a los subordinados.

Tanto el liderazgo como el monitoreo no tienen valor de confianza. Los “contratos” sobre los que se habló anteriormente acerca de intención y misión, expresan esa confianza del comandante en que sus subordinados entenderán y llevarán adelante sus deseos y confianza en los subordinados de que serán apoyados cuando ejerciten su iniciativa. Tal confianza se moldea con una forma de pensar compartida. Mientras que los pensamientos específicos y las acciones futuras de los comandantes adyacentes y subordinados serán desconocidos, sus procesos mentales deben ser claramente entendidos. Todos los niveles tienen que compartir una comprensión de la intención, la misión y el centro del esfuerzo tan buena como lo que cada uno de ellos significa. Aunque suene demasiado simple para ser efectivo, el comando y control basado en la confianza ha sido una parte integral de la guerra moderna. Esta es la forma en que operó el Ejército Alemán en la Segunda Guerra Mundial. Usted ha notado a esta altura una carencia de instrucciones sobre “cómo hacerlo”. La esencia de la guerra de maniobras en su forma de encarar las tácticas y las operaciones. En lugar de concentrarse sobre fórmulas y listas de verificación con su inherente predictibilidad la guerra de maniobras enfatiza un proceso de pensamiento. Es un proceso de ver las opciones a medida que cambia la situación. Finalmente, las técnicas de la guerra de maniobras requieren que usted despoje de su ciclo Boyd al enemigo. 
Un último elemento crítico de la guerra de maniobras debe tratarse: El arte operacional, Para obtener una apreciación de este concepto, puede ser de utilidad está  imagen. El martes 14 de mayo de 1940, el general Heinz Guderían con tres divisiones Panzer había terminado de cruzar el río Meuse en Sedan.
poderosas fuerzas Francesas estaban inmediatamente al sur, amenazando su única cabeza de puente. Guderían tuvo que tomar una decisión de importancia vital que era más estratégica que táctica. Sus tres divisiones blindadas habían abierto una gran brecha en las defensas francesas ¿En qué grado debía consolidar y proteger ese lugar de cruce?.
Guderían tomó a la 1ª. Y 2ª. Divisiones Panzer y haciendo caso omiso de todas las teorías de la guerra, las desplazó hacia el oeste, fuera de las zonas de la batalla, cruzando el terreno llano abierto del Aisne y el Somme.
¿Qué es el arte operacional? En forma general, es el arte de ganar campañas. Se ubica entre las tácticas de ganar batallas y planear operaciones, como el arte de la campaña, eso nos indica qué es, pero no mucho más. 

El arte operacional es el talento de utilizar eventos tácticos, batallas o negativas a dar batallas para golpear directamente el centro de gravedad estratégico del enemigo. Para el comandante, es el arte de decidir dónde y cuándo combatir, sobre la base del plan estratégico. Usted puede ver está definición en la decisión de Guderían en Sedán. Guderían miro más allá de su situación táctica inmediata y vió una victoria sobre los Franceses, el avance exitoso hacia el oeste significaba todo. Enlazó su situación táctica con su situación estratégica, una manera de ver el cruce del río Meuse estratégicamente y decidió que acciones tácticas tomar, dónde no combatir y dónde sí,  sobre una base estratégica.